Isidoro Errázuriz Errázuriz

Biografía Personal

Errázuriz Salas Manuel Antonio casado con (María) Rosa Errázuriz Mayo, hijo de Ramón Errázuriz Aldunate

padres de;

Errázuriz Errázuriz Isidoro (1835-1898) [1] abogado, periodista, masón, fundó el diario La Patria en 1863, casado con Virginia Hollmann; s/d.

(1) I.VALDES página 159. (2) CONSTITUYENTES página 175.  “Ese periodo de 6 años (1823-1829) aparece en nuestra historia como una luminosa interrupción, como un oasis de humanidad y candor, entre las proscripciones tenebrosas de la primera dictadura (la de O’Higgins) y las proscripciones y condenaciones por mayor de la época siguiente (los decenios autoritarios)… la nación camina así en masa tras la realización de un ideal político. Reina un espíritu tolerante y benigno en la contienda. La propia sinceridad inclina a respetar la sinceridad ajena… individuos y grupos se reconocen solidarios en una común empresa patriótica” VIAL tomo I página  578

Descendencia

Fuentes

Trayectoria Política

Errázuriz Errázuriz Isidoro (1835-1898)  miembro del Partido Liberal, pretende ser diputado, pero la intervención oficial le arrebata el triunfo; durante la guerra con España se da a conocer como gran tribuno, valiente y patriota con brillanes arengas;  diputado 1867-1870 por Linares, diputado por Cauquenes 1870-1873: “Adversario de la fusión liberal-conservador de 1863, miembro del PR que acabó de desprenderse de ella, no tiene, sin embargo, la inflexibilidad y el puritanismo de las doctrinas. Servidor de la causa liberal… es un político de victoria” (2); reelecto 1873-1876 por Cauquenes; diputado por la Serena 1876-1879;

durante la Guerra del Pacífico, haciéndose é eco del sentimiento nacional obligó al Gobierno a llevar nuestras armas triunfadoras hasta Lima

diputado por Valparaíso 1879-1882, 1882-1885 y 1885-1886: “impulsa y apoya en enero de 1886 el término del debate obstruccionista de la Ley de Contribuciones por una minoría de la Cámara (1); senador 1892-1894,

ministro de Justia en vísperas de la gravec risis política que terminó con la Guerra Civil de 1891 que solamente duró desde noviembre de 1889 hasta el 28 de enero de 1890, conocido como «Ministerio de Armonia» que una vez aprobada las leyes de Presupuesto y Contribuiones fue llevado a la dimisión por el ministro Valdés Carrera, amigo íntimo del Presiddente Balmaceda;

Ministro de RR.EE. 1892-1893, Ministro de Guerra 1893, embajador en Brasil 1896.

[1] (1) I.VALDES p. 159. (2) CONSTITUYENTES p. 175.  “Ese periodo de 6 años (1823-1829) aparece en nuestra historia como una luminosa interrupción, como un oasis de humanidad y candor, entre las proscripciones tenebrosas de la primera dictadura (la de O’Higgins) y las proscripciones y condenaciones por mayor de la época siguiente (los decenios autoritarios)… la nación camina así en masa tras la realización de un ideal político. Reina un espíritu tolerante y benigno en la contienda. La propia sinceridad inclina a respetar la sinceridad ajena… individuos y grupos se reconocen solidarios en una común empresa patriótica” VIAL I  578

Bibliografia

Hombres y cosas durante la guerra. Serie de artículos editoriales de La Patria, escritos con motivo de la publicación de la Memoria de Guerra de 1881.

En «Perfiles y Bosquejos» hay una biografia suya. «Educado en Estados Unidos y Alemania es a un tiempo soldado de la Libertad y de la Democracia y del Orden y del Progreso y un formidable hombre de acción que pone sus extraordinarias capacidades intelectuales y su vasta cultura al servicio de nobles ideales. El tibuno y periodista impulsa la guerra con España en 1866 y el diputado intrépido y patriota es el principal instigador de la campaña a Lima, pelea en Chorrillos y Miraflores y entre triunfante en la capital peruano; asi como, mas tarde, el admirador incondiconal de la Libertad que siempre feura es el alma de la resisencia del Congreso con contra del Presidente Balamceda, poderoso Ministro -casi omnipontente- de la Junta de Gobierno de Iquique y igilante organizador del Ejército Constitucional.

«Con motivo d ela candidatura del General Cruz, inspiró y dirigió, dentro del Instituto Naiconal, uan serie de manifestaciones subversivas que llegaron a tales extremos qu el bondadoso rector del establecimiento Francisco de Borja Solar, se vio obligado a expulsarlo en compañía de otros muchachos igualmente inteligentes, pero también completamente indóciles, indisciplinados y libertarios… a mediados del año 51 partió a Estados Unidos, via Panamá… luego viaja a Alemania donde obtiene el titulo de Doctor en Derecho…. su amor innato por la LIbertad, acrecentado con su permanencia en la libre democracia americana, le hace seguir con simpatía los esfuerzos de los patriotas hannoverinos de Alemania para alcanzar un gobierno con base democrática… conoce a una encantadora joven hija de un gran comerciante de Hamburgo, Virginia Hollman y se enamora locamente de ella… dama hermos y de talento, pero extrraordinariamente tímida, hablaba un francés muy suave y luego un correcto castellano y de todo su ser parecia desprenderse dulzura, bondad y afcto…. ella, después de muchos esfuerzos inútiles y de años de pnas infinitas, no pudo resignarse a las perpetuas infidelidades de su marido y a él le faltó paciencia para soporar la inevitables y justificadas escenas de celos… quizás él también la amo internsamente, pero le fue infiel como a todas las demás que econtrpo en su camino… vuelto funda, en compañia de Vicuaña Mackena, Los Mata, Custodio Gallo y Justo Arteaga Alemparte, el diario «La Asamblea Constituyente», que solo alcanza a publicar trece números… para ganarse la vida en esos años de proscrito escribe, hace clases, ejerce de abogado y por ultimo acepta y desempeña con general complacencia un cargo de juez.  (1)

Otras publicaciones

Escribiendo en el periódico LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE, de Benjamín Vicuña Mackenna, en 1958:

«No durmamos por Dios sobre los laureles de los triunfos de ayer. La atmósfera pesada, que nos abruma, marchitaría pronto esos laureles. Arriba¡. De combate en combate, de victoria en victoria es como se llega al termino de las grandes revoluciones, que cambian la faz de los pueblos. Arriba¡ Despertemos la inercia con el entusiasmo, ahoguemos las rencillas con el patriotismo y la unión. El dia en que la opinión pública, sacerdotisa indignada, de pie desde el desierto hasta el estrecho, fulmine su acusación tremenda y despliegue al viento la bandera de los pueblos, ese día será el último del sistema corruptor ¡el primero de la época de gloria»

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