10 May Vergara Alvarez Salvador
Biografía Personal
Vergara Álvarez Salvador (1862-1917) general de división, casado con Blanca Vicuña Subercaseaux, hija del destacado Benjamín Vicuña Mackenna, quien en mas de una ocasión acompaño a dirigir las obras del cerro Huelén, en vías de convertirse en cerro Santa Lucia.
Fundo la población Vergara, Reñaca, el Muelle y todo el lado norge desde el estero de Viña hasta Quilpué, siendo una de las familias mas influyentes de la región.
Descendencia
Vergara Vicuña Aquiles (1895-1968) militar, diplomático, Partido Radical, diputado por Coquimbo 1921-1924, Ministro de Justicia; a raíz del golpe de Estado manifestó: “la bandera liberal y democrática que han agitado los revolucionarios del 23 de enero queda arriada por ellos mismos al entregarla al que más la escarneciera con sus inconsecuencias a sus grandes postulados y nobilísimas enseñanzas”, s/s
Vergara Vicuña Blanca Victoria casada con Carlos Zañartu, viuda casada 2 con Humberto Zamorano, tampoco tuvo hijos.
Vergara Vicuña Federico, “se ha dedicado a la prensa y a los viajes” casado con Luisa Klickmann, con dos hijos: José Francisco y Blanca Diana (1932). Federico fue «una aventurero y trotamundos, cazador de elefantes y tigres, que escribía sus proeza en «La Nación» y «Los Tiempos», (1)
(1) El Mercurio 2 noviembre 2013
Fuentes
Trayectoria Política
Vergara Álvarez Salvador (1862-1917) combatió en la revolución de 1891 contra Balmaceda a pesar de la amistad que tenía con él, Ministro de Guerra 1915-1916: “de noble y patriota estirpe, Valente en la guerra y amigo de aventuras y hazañas, había demostrado en un paso anterior por la cartera de Guerra la eficiencia de sus dotes de organizador. Era un factor de progreso y de disciplinal. Aún se cría distinguir sobre la manga izquierda de su casaca de general en retiro, la faja roja que llevaban las fuerzas constitucionales como distintivo en la revolución de 1891, en la que había hecho gala de su valor y de su pericia. Era también una garantía de mantenimiento del régimen parlamentario” (1).
(1) RIVAS tomo II p. 7.