Rodríguez Villalobos (Leopoldo) Silvio (1931-2018) [1] hijo de José María Rodríguez Gutiérrez y Carmen Villalobos Alcántara; abogado, comerciante, presidente de la Cámara de Comercio;  director de la Cámara de Comercio de Talca 2010-2012; casado con María Teresa Abásolo Martínez; 4 hijos.

Rodríguez Abásolo Patricia (1961)[1] contadora

Rodríguez Abásolo María Teresa (1960)[2]

Rodríguez Abásolo Marcela Andrea (1964)[3]

Rodríguez Abásolo Leopoldo Silvio (1962)[4] ingeniero comercial, gerente general y socio de Autocarp-Kai, Rentas RA4 Ltda., Inmobiliaria Rodríguez Ltda., Rentas San Agustín Ltda.; casado con María Luisa Benavente Pelén (1959) profesora, h. Carlos Daniel Benavente Merino (1927-2000)[5] y Gabriela Genoveva Pelén Puchen; 3 hijos.

[1] I. 3.705 nacimiento 1961 Talca

[2] I. 2.399 nacimiento 1960 Talca

[3] I. 3.657 nacimiento 1964 Talca

[4] I. 879 matrimonio 1988 Concepción; I. 3.904 nacimiento 1959 Concepción

[5] I. 988 nacimiento 1927 Los Ángeles, h. Carlos Benavente Benavente PR, regidor de Laja 1950 y 1956 (de Eulogio Benavente Onfray, regidor de Laja 1904, y Carmen Benavente Vinet) y Luisa Merino de Benavente

Rodríguez Villalobos (Leopoldo) Silvio (1931-2018) miembro del Partido Nacional, regidor de Talca 1967, diputado por Talca 1969-1973 y  reelecto 1973 (11.094 votos, 13.2%), uno de los redactores del acuerdo de la Cámara de Diputados del 22 de agosto de 1973;  candidato a senador 1989 por Maule (15.674 votos, 5.8%) como independiente en la lista UDI-RN.

[1]  “Reconocemos y apreciamos que el gobierno militar instaurado el 11 de septiembre de 1973, fue la respuesta apropiada al caos en que se encontraba el país, ya que puso fin a la incipiente guerra civil, consolidó el Estado de Derecho, creó una nueva institucionalidad que ha permitido el restablecimiento de la democracia y reemplazó la rigidez de los esquemas ideológicos totalitarios de la UP por la libertad económica que impulsó el gran salto de Chile hacia el progreso…” declaración de diputado Partido Nacional de 1973, El Mercurio 21 agosto 2003. CONJURA página 248